El mal se vence haciendo el bien
- cenfoli
- 18 ago 2021
- 2 Min. de lectura
"Vivan en armonía unos con otros. No sean tan orgullosos como para no disfrutar de la compañía de la gente común. ¡Y no piensen que lo saben todo! No dejen que el mal los venza, más bien venzan el mal haciendo el bien."
(Romanos 12:16, 21 NTV)
La naturaleza humana sera siempre atraida al mal, pero el apostol Pablo nos exhorta a vivir en paz con todos los hombres, a vivir y actuar como cristianos.
La única manera para poder responder al pedido de Dios como cristianos es permitiendo en nuestro corazón ser llenos del fruto del Espiritu Santo que es el amor, que procede de Dios.
Y ese amor nos lleva a amarnos fraternalmente, sabiendo que todos tenemos debilidades e imperfecciones, pero con el amor de Dios podemos aceptar, perdonar y comprender que también nosotros tenemos debilidades.
No debemos dejar que el mal nos venza, mas bien debemos vencer el mal con el bien.
El orgullo no nos permite disfrutar de la compañia de la gente humilde.
El orgullo nos hace autosuficiente creyendo que todo lo sabemos y que no necesitamos de la ayuda de otros.
En cambio, Si tus enemigos tienen hambre, dales de comer. Si tienen sed, dales de beber. Al hacer eso, amontonarás carbones encendidos de vergüenza sobre su cabeza.
(Romanos 12:20 NTV)
Cuando somos vencido de lo malo reflejamos la cimiente del mal en nosotros, y evidenciamos con nuestros frutos la naturaleza del mal, pero el llamado del creyente es a vivir controlados por el bien y no por el mal.
A hacer lo bueno es vivir en paz con todos los hombres, a no pagar mal por mal. E inclusive a darle de comer y de beber a nuestros enemigos.
De esta manera podemos reflejar el fruto del amor de Cristo en nosotros, y constribuimos a la paz y no a la guerra y al odio que gobierna a la gente que no tiene a Cristo.
Haciendo el bien vencemos el mal, no Haciendo lo malo mostramos el amor de Cristo a nuestro prójimo.
Estamos llamados a pensar, vivir, actuar, hablar el lenguaje de Dios, a reproducirlo en esta sociedad controlada por el mal.
Pastora Martha Castro
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