Sembremos semillas de amor
- cenfoli
- 2 jul 2021
- 2 Min. de lectura
Vivan en armonía unos con otros. No sean tan orgullosos como para no disfrutar de la compañía de la gente común. ¡Y no piensen que lo saben todo! Nunca devuelvan a nadie mal por mal. Compórtense de tal manera que todo el mundo vea que ustedes son personas honradas. (Romanos 12:16-17 NTV)
La única forma de comprobar que amamos a Dios, es teniendo amor los unos por los otros.
La única forma para alcanzar la unidad es a través de la humildad.
El orgullo y la altivez no nos deja disfrutar de la compañía de la gente común aunque tengan diferencias.
Y tampoco nos permite expresar el perdón y la reconciliación con aquellos que tienen discrepancias con nosotros.
El llamado a la unidad es repetitivo en las cartas de pablo.
Satanás se aprovecha cuando encuentra corazones cerrados al perdón y que no disfrutan de sanas relaciones.
Pablo llamó a los cristianos de Filipos a que completaran su gozo sintiendo el mismo amor por los demás, así como el que él sentia por ellos.
Llamo a estar unánimes sintiendo una misma cosa.
Para matar o extirpar las enemistades que provoca Satanás en los ágapes de los cristianos, y en el ceno de los hogares, matrimonios y Familias debemos poner en práctica:
1. La ley del amor y del perdón a través de la humildad.
No sean egoístas; no traten de impresionar a nadie. Sean humildes, es decir, considerando a los demás como mejores que ustedes. No se ocupen solo de sus propios intereses, sino también procuren interesarse en los demás.
(Filipenses 2:3-4 NTV)
2. Estimando cada uno a los demas como superiores a él mismo.
La mejor terapia para la sanidad mental y emocional, es el perdón y la reconciliación que requiere humildad.
Si no hay relaciones sanas, no habrán emociones sanas , matrimonios sanos, familias sanas, iglesia sana y sociedad sana.
El carácter y la conducta empiezan en la mente. Nuestros actos se ven reflejados por aquellas cosas que dan cabida en nuestros pensamientos.
Concentremos nuestros pensamientos en aquello que trae consigo una vida digna de amor y perdón.
Y ahora, amados hermanos, una cosa más para terminar. Concéntrense en todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo bello y todo lo admirable. Piensen en cosas excelentes y dignas de alabanza. (Filipenses 4:8 NTV)
Si sembramos semillas de amor, de seguro recogeremos abundante cosecha de amor.
Pastora Martha Castro
Comments